Un verano histórico en la pedanía valenciana de El Palmar.
La Virgen de los Desamparados en su reciente visita a El Palmar. Foto de Manolo Guallart.
Hace pocos días, el 21 de julio, recibía la visita de la imagen peregrina de la Virgen de los Desamparados -que posteriormente seguiría camino hasta El Perellonet-, con un completo fin de semana espiritual y mariano.
Cristo de la Salud (El Palmar) en la Basílica de la Virgen de los Desamparados. Foto de Manolo Guallart.
Al día siguiente la población realizó una excepcional peregrinación a Valencia, en acción de gracias a la Virgen, acompañando al Santísimo Cristo de la Salud hasta la Basílica, con una multitudinaria procesión que recorrió -desde el Palacio Arzobispal- la plaza de la Reina y la calle del Miguelete para entrar por la puerta principal hasta los pies de la patrona.
Apenas unos días después, el 4 de agosto tuvo lugar la tradicional romería del Cristo hasta el centro de lago de la Albufera, que reunió a cerca de siete mil personas en una población de casi un millar de vecinos. Previamente el arzobispo de Valencia, cardenal Antonio Cañizares, que presidió la celebración, llegó a la parroquia del Niño Jesús del Huerto donde fue recibido por el párroco Gonzalo Albero, rezando junto a varios sacerdotes ante la imagen del Cristo de la Salud que estaba en el centro del templo preparada para los actos.
El toque manual de la campana de la iglesia, realizado a mano con cuerda desde la puerta de la parroquia, anunciaba fiesta grande en la plaza de la Sequiota. Allí se congregaron multitud de devotos, representantes de las fallas de poblaciones cercanas, la reina de l´Horta (Ester Vicent).
También la alcaldesa de El Palmar, Raquel Romero, concejales del ayuntamiento de Valencia -Sergio Campillo, Consol Castillo, Fernando Giner, Manuel Camarasa, Amparo Picó, Alfonso Novo, Lourdes Bernal y Eusebio Monzó- y el presidente de las Cortes Valencianas Enric Morera. Llegaron también las Falleras Mayores de Valencia, Alicia Moreno y Sofía Soler, acompañadas de sus Cortes de Honor y directivos de la Junta Central Fallera.
A los acordes del himno nacional -esta vez sin polémicas- interpretado por la Agrupació Musical El Palmar, la imagen salió del templo a hombros de los portadores y partió desde la parroquia del Niño Jesús del Huerto, recorriendo las calles principales,de la población hasta el embarcadero.
Tras la imagen santa, las autoridades eclesiásticas y civiles, las camareras del Cristo de la Salud y clavarios de la cofradía, entre ellos el clavario Vicente Aleixandre, ex-concejal de Pedanías del Ayuntamiento de Valencia.
Participaron en la romería embarcaciones pesqueras de El Saler, Silla, Sollana Catarroja, Pinedo y el Perellonet, todas ellas en las riberas de la Albufera, que portaron a los devotos hasta el lluent, en el centro del lago. Allí, tras la lectura del Evangelio, el cardenal Cañizares se dirigió a los presentes con su predicación, pidiendo al Santísimo Cristo de la Salud «que avive nuestra fe» y recordando que «la Iglesia es esta barca en la que, también en medio de tempestades y vientos, está Jesús para enseñarnos a ser misericordiosos».
En el atardecer de la Albufera llegó el emotivo canto de los gozos al patrón:
«Pues toda salud y amor,
contemplo en Vos, dueño amado.
Dad salud al que, postrado,
os la pide con fervor.»
Tras el regreso a la parroquia, el himno, los pétalos que las camareras del Cristo lanzaron con gran fervor y una mascletà nocturna en la zona verde junto al canal.
Varias vueltas en honor al Cristo de la Salud, levantado por los portadores en la noche festiva y entre aplausos de todos los presentes.
Una vez dentro de la iglesia y en presencia del Cristo de la Salud, el cardenal Cañizares comunicó al párroco Gonzalo Albero que el Arzobispado de Valencia solicitará en breve a la Santa Sede un Año Jubilar para El Palmar (2017-2018) -con motivo del 75º aniversario de la imagen- tras ver la gran devoción y participación de la feligresía en esta histórica jornada.
En 2014 la romería del Cristo de la Salud hasta la Albufera cumplió 40 años. Su origen se remonta a la visita de la imagen peregrina de la Virgen de los Desamparos en 1973 y que salió en procesión por el lago. Al año siguiente, vecinos y devotos realizaron esta misma celebración -que ha ido creciendo con los años- con su patrón, el Cristo de la Salud, al que solicitan cada año por estas fechas salud corporal y espiritual, así como buenas cosechas para la demarcación.
Aquí está el REPORTAJE FOTOGRÁFICO
