Cada 15 de agosto el Grao de Valencia vive en su parroquia, Santa María del Mar, una fiesta especial. Por una parte, Nuestra Señora de la Asunción, con patronazgo canónico desde 2015; por otro la memoria de la llegada del Cristo del Grao hace ya más de seis siglos.
En la celebración solemne tuvo lugar la misa por la mañana. Con la imagen de la ‘Dormición de la Virgen’ en el centro delante del presbiterio, el presidente de la asociación mariana proclamó la ‘Lectura de la Palma’, realizándose a continuación una novedosa procesión con la imagen de la Virgen por la plaza del Tribunal de las Aguas, retornando a la parroquia para proseguir con la celebración.
Presidió la eucaristía el vicario Abel Coll, acompañado por el párroco José Vicente Calza. Junto al presidente de la Asociación de Nuestra Señora de la Asunción del Grao, José Ramón García y el presidente de la Hermandad del Santísimo Cristo del Grao, Benito Román, hubo representación de la Junta Mayor de la Semana Santa Marinera, del altar de San Vicente Ferrer de la Playa, así como de cofradías y hermandades del Marítimo.
Una lectura mariana, ya casi al final, fue el momento previo a ver cómo varias devotas cubrían la imagen yacente de la Virgen (la Dormición de María), esparciendo sobre ella pétalos de rosas. Trasladada la Virgen a un espacio reservado, por la puerta principal del templo fue el momento de la entrada triunfal del Santísimo Cristo del Grao, portado por los miembros de la Hermandad y recibido con gran alegría por todos los presentes.
Tal como fuera la víspera con la Asunción, el Cristo de Grao fue objeto de veneración en un multitudinario besapié.
Fiesta grande, por tanto, en el Grao. Una fecha histórica en la que celebra a sus patronos en el templo de Santa María del Mar, referente de los Poblados Marítimos desde tiempos de la Reconquista.
(Fotos: Rafa Montesinos)