En 2008 el Ayuntamiento de Valencia encargó de forma urgente al historiador y bibliófilo Rafael Solaz que estableciera una serie de rutas por el Cementerio Municipal de Valencia. Allí comenzó una aventura personal que Solaz ha convertido en una de sus experiencias más significativas. Su interés por investigar, valorar obras de arte, información histórica, le ha llevado a realizar descubrimientos de tumbas relevantes desconocidas por los visitantes habituales, llegando a plasmar su labor en relatos y artículos. La propuesta de la concejala Lourdes Bernal fue tomando forma y desde hace muchos años es una realidad.
En noviembre de 2012 Rafael Solaz fue el comisario de una exposición con grandes paneles en el entorno de la capilla del cementerio, «Escultores del Silencio», un trabajo realizado por el fotógrafo Manolo Guallart (director de Valencia, Fiesta y Tradición) con imágenes de obras escultóricas y arquitectónicas de importantes artistas del pasado y en relación con personas y personajes ilustres de nuestra historia. ASÍ FUE LA EXPOSICIÓN [button style=’red’ url=’https://www.flickr.com/photos/94296774@N06/albums/72157637118859953′]ESCULTORES DEL SILENCIO[/button]
Ahora Solaz acaba de presentar el libro «Museo del Silencio» en el salón de actos de la Real Sociedad de Agricultura y Deportes. El propio Guallart conversó con el autor al finalizar el acto.
«Museo del Silencio», por Rafael Solaz
1.- ¿Cómo ha visto el acto de presentación?
El libro ha sido editado por Samaruc Editorial (presente Marcos Zacarés) y lo ha presentado por el concejal de Cementerios Alejandro Ramón. Han estado presentes en el acto el vicedecano de la Real Academia de Cultura Valenciana Ballester Olmos, Antonio Campos “La Margot”, Javier Goerlich (biznieto del famoso arquitecto), los fotógrafos Manolo Guallart, Pilar Sampedro, Tono Giménez, integrantes de la Societat Bibliogràfica Valenciana, el también arquitecto Ximo Monfort, además de otros muchos amigos y familiares.
2.- ¿Cómo surge la idea del libro?
El proyecto comienza con las rutas por el cementerio. Durante esos once años fui recopilando datos hasta que el proyecto ha sido una realidad.
3.- ¿Qué apartados destaca del libro? La parte gráfica me encanta, porque gracias a las fotos vemos un auténtico recorrido, una ruta de imágenes que nos permite ver el cementerio en toda su extensión.
4.- ¿Qué formato presenta?
Anécdotas, historia, experiencias, visitas… Cada vez viene más gente a las visitas, que son gratuitas, y están patrocinadas por el propio Ayuntamiento que se encarga de su organización y control. Calculo que durante once años han pasado unas diez mil personas. El cementerio tiene mucha historia, los últimos 200 años de la ciudad de Valencia están aquí representados. Durante cada visita se producen muchas anécdotas e interés por saber más sobre el cementerio; y mucha gente repite o vuelve por su cuenta.
5.- ¿Cada cuánto hay visitas guiadas? ¿Y nocturnas? Normalmente son el primer sábado de cada mes. Se dejó de realizar las nocturnas porque suponía un riesgo, un componente de seguridad que no contemplaba el propio consistorio.
6.- Defina en una frase el Cementerio Municipal de Valencia.
Un auténtico museo al aire libre en el que se recuerda a los seres queridos.
7.- ¿Tiene en cuenta en el libro los otros cementerios de la ciudad?
En el libro hay un apartado resumido que cuenta los seis cementerios municipales que existen en Valencia y alrededores.
8.- ¿A quién recomienda el libro?
A todas las personas, ya que se trata de un auténtico museo casi desconocido para los valencianos.
9.- ¿Cómo valora la gran aportación de fotografías y de tantas personas? Este aspecto es fundamental. Sin las aportaciones de los amigos fotógrafos hubiera sido distinto el libro. Es un valor añadido que agradezco sinceramente a todos ellos.
Concluye Rafael Solaz. «Invito a todas las personas -si no conocen estas rutas- a que se apunten, vengan y disfruten de un recorrido interesante, lleno de historia, arte y biografías.»
Una nueva aportación a la historia, la cultura y las tradiciones valencianas en vísperas de ese inicio del mes de noviembre, propicio para visitar en el cementerio a seres queridos y, a partir de este interesante libro, descubrir mucho más del principal camposanto valenciano.