En menos de quince días la conocida popularmente como ‘la Catedral de Ruzafa’, la parroquia de San Valero Obispo y San Vicente Mártir, ha celebrado a sus dos titulares y a San Blas. Fiestas de barrio significativas porque Ruzafa es uno de los barrios más antiguos de Valencia, con un gran templo parroquial que tiene su origen en la Reconquista del Rey Jaime I.
Un amplio horario, con apertura desde las 8.30 horas hasta las 21 horas para permitir la participación de los fieles en las celebraciones en honor a San Blas en el día de su festividad litúrgica así como la veneración de la reliquia del santo, con su imagen ubicada para la fiesta en la primera capilla lateral de la derecha, que habitualmente tiene la presencia de la Purísima. Cuatro misas durante la jornada (y la bendición de panes que portan los propios feligreses), con trasiego permanente por parte de viandantes y feligreses tan en el exterior como en el interior del templo.
En la calle, con música de tabal i dolçaina, la imagen procesional de San Blas y largas colas, mañana y tarde, para pasar ante él, agradecerle y pedirle tanto como cada año. Frente a la entra principal, los puestos con medallitas, aceite bendecido y las tradicionales ‘coquetes’ elaboradas expresamente para este día, así como el ‘porrat’ que es típico de este tiempo invernal durante las fiestas de barrio. La Cofradía de San Blas celebra la fiesta desde el siglo XVI. Antes y después de la procesión, el nuevo párroco, Juan José Lloréns, acoge a centenares de fieles -tanto adutos como menores- en la ‘passà’ para recibir el aceite bendecido que mitiga los males de garganta.
[button style=’red’ url=’https://www.flickr.com/photos/94296774@N06/albums/72157712961927466′]REPORTAJE FOTOGRÁFICO[/button]
Más tarde, la procesión por el barrio lleva a devotos, niños, sacerdotes y vecinos en general por las calles antiguas de Ruzafa, bordeando el gran mercado y retornando bajo la atenta mirada de la torre campanario, con repiques de fiesta durante el recorrido.
[quote cite=’ La devoción a San Blas en Ruzafa congrega a mucha gente que viene de fuera del barrio y de la ciudad. El aciete que se impone sobre la garganta de los que pasan quiere recordar que Dios cura de todos los males y tengamos presente el Bautismo y la Unción con la que nos incorporamos a la Iglesia. ‘ align=’left’]Juan José Loréns, párroco de San Valero[/quote]
San Blas (Fuente: AVAN)
San Blas fue un médico y obispo de Sebaste- actualmente en Turquía- durante los siglos III y IV. Hizo vida eremítica en una cueva en el bosque del monte Argeus que convirtió en su sede episcopal. Fue torturado y ejecutado en la época del emperador romano Licinio durante las persecuciones a los cristianos de principios del siglo IV. Uno de los milagros que se le atribuyen a San Blas es la curación de un niño al que se le clavó una espina de pescado en la garganta.