Fotos: Antonio Cerveró.- Amstel y Ricardo Caballer han conseguido reunir, por cuarto año consecutivo, a más de 120.000 personas en la mascletà más sostenible disparada en la ciudad de Valencia. Un espectáculo que ha vuelto a sorprender a los valencianos con un espectáculo en el que se han disparado más de 1.800 kilos de material pirotécnico.
Durante 10 minutos, La Marina de València ha vibrado con un combinado de los mejores elementos de mascletà y castillo de fuegos artificiales, respondiendo así a las demandas del público valenciano y fallero que quiere intensidad, ruido, pólvora… pero también valora la belleza del disparo, los colores, las luces y dibujos que se forman en el cielo.
Por motivos de seguridad a causa de la climatología, se ha suspendido el disparo del espectáculo vertical.
Cabe destacar que la mascletà ha sido 100 metros más ancha que el año pasado, pasando de 180 a unos 330 metros en paralelo a la dársena, lo que ha permitido que esta haya podido ser vista desde más ángulos, para el disfrute de toda la ciudad.
Pero uno de los aspectos más destacados del innovador espectáculo pirotécnico y como muestra del compromiso de Amstel con el entorno y la protección del medio ambiente, es que, en esta ocasión, se ha conseguido reducir en un 70% los residuos de la mascletà, utilizando el propio material pirotécnico como soporte, es decir, tres cuartos de la mascletà han desaparecido totalmente sin dejar ni rastro en la ciudad.
El 30% por ciento del material restante utilizado, y que no es posible que desaparezca sin dejar residuo, es el papel y cartón biodegradable utilizado en los truenos, el cual desaparece en contacto con el agua o el suelo sin causar daños en el entorno. Además, cabe destacar que en este espectáculo pirotécnico no se ha utilizado ningún tipo de plástico ni químico considerado, en la actualidad, como producto químico nocivo para el medio ambiente.