El Grao de Valencia vuelve a recibir al ‘Negret’ en la Escalera Real del Puerto
Fotos: Vicente Almenar, Rafa Montesinos y Luis Timón.- Este miércoles, primero de mayo, se ha vuelto a reproducir en la antigua escalera real del Puerto de Valencia una escena que la tradición sitúa en 1411, cuando una imagen de Jesús crucificado llegaba a las aguas del Grao de Valencia flotando sobre una escalera y ennegrecida la madera por la acción del agua.
Fue éste un hecho que corrió como la pólvora por lo que entonces se denominaba el Poble Nou de la Mar y que fue visto por sus habitantes como un milagro y, sobre todo, como un motivo de alegría y fervor religioso que perduraría siglos y siglos. Tras una breve disputa entre los vecinos del barrio de Russafa y los del Grao por hacerse con la imagen, el Cristo se quedaba en éste último.
Han pasado 613 años ya desde entonces, y el Grao sigue abriendo el mes de mayo recibiendo a su ‘Negret’, denominación popular derivada de aquel color negruzco de la madera, con todos los honores en el Puerto de Valencia, junto a la antigua escalera real. Un acto que se vive con gran devoción y alegría en este barrio marítimo.
Una poblada comitiva se congregaba en los aledaños del Edificio del Reloj y, tras recibir al Cristo sobre la escalera, emprendía camino en procesión hasta la cercana parroquia de Santa María del Mar, cuyas campanas repicaban de nuevo al tiempo que las salvas le hacían los honores sobre las Atarazanas.
Tras la oración de bienvenida a su patrón, la tradición se volvía a hacer hueco en el ceremonial y las gentes del Grao, tras este periodo de sufrimiento y sacrificio que nos ha tocado vivir a todos, volvían a entonar esos versos tan suyos de “Als teus fills no desampares, Santísim Crist del Grau…”, que en estas circunstancias cobran quizás más sentido y significación que nunca.
Se cumplía finalmente otra de las tradiciones asociadas a esta celebración: El paso de los feligreses por la imagen para besarle los pies con la acostumbrada reverencia, pero las fiestas en honor al Cristo del Grao no paran ahí, y estos días sucesivos volverán a congregar a vecinos y visitantes del Grao con diversos actos.