Fotos: Javier Furió.- Como es costumbre desde tiempos inmemoriales, las Rocas o Carros Gloriosos del Corpus Christi han abandonado su habitual ‘albergue’ en el Museu del Corpus para alojarse de forma provisional en la calle Blanquerías, frente a las Alameditas de Serranos, desde donde esta tarde partirán hacia la plaza de la Virgen, recorriendo la calle de Serranos de punta a punta.
Así, una numerosa ‘colla’ de empleados de una de las contratas municipales se empleaban a fondo desde primera hora de la mañana de este viernes con un gran despliegue de fuerza y una buena dosis de pericia a la hora de ejecutar las maniobras para obrar lo que parece un milagro -viendo el espacio que ocupan ya se intuye la tremenda dificultad que entraña- y sacar del Museo una por una los 11 carros procesionales, las Rocas del Corpus.
El buen tiempo y la cercanía del fin de semana ha congregado en este momento de la Festividad del Corpus a buena cantidad de turistas que, extrañados y curiosos, han quedado encantados con la posibilidad de observar de cerca estos monumentos con ruedas con siglos y siglos a sus espaldas.
A lo largo de la mañana, Amics del Corpus está entregando los famosos Pomells a las instituciones valencianas: Generalitat, Diputació y Ajuntament de Valéncia. Y ya esta tarde, las Rocas tomarán la calle Serranos para terminar ‘durmiendo’ en la Plaza de la Virgen, donde quedarán custodiadas hasta su participación en la Procesión del Corpus el domingo por la tarde.
