El concejal de Cultura Festiva y presidente de la Junta Central Fallera, Pere Fuset, ha anunciado hoy el inicio de los trabajos para restaurar una de las colecciones principales del Museo Fallero, la de los carteles oficiales y los finalistas. Estas obras muestran una gran calidad artística y tienen un valor histórico importante.
“El factor humano es uno de los más bonitos, emocionantes e importantes para que las Fallas sean tan especiales como son. La creatividad de los artistas permite que cada año aumentemos nuestro patrimonio cultural festivo con obras que merecen el reconocimiento y la apuesta decidida del Ayuntamiento de València para preservarlas y ponerlas en valor”, ha explicado Fuset.
Los trabajos se centran en la restauración y la conservación preventiva de los carteles que por el paso del tiempo se han deteriorado, sobre todo los más antiguos. De hecho, durante la primera fase de la intervención se tratarán los carteles correspondientes a 1931 (obra de Josep Amérigo, uno, y otro de Josep Bellver y Manuel Diago), 1933 (también de Josep Amérigo) y 1951 (Enric Yelo). Según ha explicado el director del museo, Gil-Manuel Hernández, estas obras precisan trabajos de reposición, limpieza y desinsectación, entre otros trabajos de restauración y consolidación, hechos rigurosamente por profesionales especializados en la restauración de papel. La intervención municipal también contempla el tratamiento de otras obras, como el cartel ganador de 1932 (obra de Rafael Raga) y el de 1952 (Enric Yelo). “El proyecto a medio plazo contempla reintegrar el esplendor original de los carteles falleros expuestos en el Museo Fallero de València, que suponen una de las mejores muestras del patrimonio cultural fallero”, ha añadido Fuset.
Esta actuación para recuperar y conservar los carteles falleros se suma a las ya realizadas por el Ayuntamiento de València para dignificar y dar a conocer el Museo Fallero. Así, el pasado mes de mayo se consiguió la consideración oficial como museo para este centro que, desde junio, se vio sometido a una reforma integral de todas las salas. A parte de la creación de un nuevo espacio expositivo también se ha dotado de una nueva imagen corporativa, de una nueva página web con una aplicación que permite una visita virtual en 360 grados y de nuevas redes sociales.
Además, se han organizado visitas guiadas y se han diseñado actividades culturales para mejorar la conexión del Museo Fallero con las comisiones falleras y reforzar la llegada de un turismo cultural de calidad. Por otra parte, ha tenido un papel importante en la creación de la Red Valenciana de Museos Falleros. “En muy poco tiempo hemos adecuado el Museo Fallero al siglo XXI y le hemos dado todo el valor que el mundo fallero y su patrimonio merecen”, ha dicho para finalizar Fuset.
