La procesión de entrada en la celebración del Jueves Santo en la Catedral de Valencia se inicia como todas con la Cruz y en Santo Evangelio, desde la sacristía hasta el altar mayor. Pero en esta ocasión, al llegar a la capilla del Santo Cáliz, se incorpora la sagrada reliquia en una urna custodia por miembros de la cofradía y de la hermandad. Es la unica vez del año que sale de su lugar habitual a excepción de la fiesta anual en octubre.
Es la noche de la Santa Cena del Señor, el Día de Amor fraterno, el momento eucarístico el año cristiano. La catedral rebosa de fieles en el inicio del Triduo Pascual.
Tras la homilía del arzobispo, cardenal Antonio Cañizares, el prelado lava los pies en el altar mayor a varios sacerdotes y otros tantos laicos recordando el gesto de Jesús relatado en el Evangelio de San Juan.
El Santo Cáliz preside la celebración en memoria de la institución de la Eucaristía en este Año Jubilar del Cáliz de la Misericordia.